Wanda Nara le pegó donde más le duele a Mauro Icardi: qué pasó

La disputa entre Wanda Nara y Mauro Icardi ha escalado y ahora afecta directamente a sus hijas, de 8 y 10 años, quienes quedaron atrapadas en el centro de una intensa batalla judicial. Mientras el futbolista acusa a Nara de instrumentalizar a las pequeñas, la conductora lo denunció por coaccionarlas.

Según fuentes legales, los abogados de Wanda Nara notificaron al juzgado que no entregarán la custodia de Francesca e Isabella, incumpliendo el acuerdo de alternar la tenencia cada 15 días. La audiencia para definir la situación se llevará a cabo el viernes 24 de enero a las 10 de la mañana.

Desde el Estudio Jurídico Payarola, que representa a Nara, alegaron que no cederán la custodia debido a un supuesto caso de coacción por parte de Icardi. Además, se habría solicitado que el cuidado de las menores quede exclusivamente bajo la responsabilidad de la conductora y que cualquier comunicación entre el futbolista y sus hijas sea supervisada por el juzgado.

En la denuncia presentada, los abogados de Wanda aseguraron que las niñas habrían sido obligadas a mentir sobre su contacto con Silvia Lucero, una niñera que tiene una orden de restricción para mantenerse a más de 100 metros. Según afirman, la mujer habría estado con las menores mientras estaban bajo el cuidado de Icardi.

Por otro lado, la abogada de Mauro Icardi, Elba Marcovecchio, afirmó que el jugador siempre priorizó su rol como padre por encima de otras actividades sociales. En su defensa, sostuvo que Wanda Nara no solo incumplió el acuerdo de entrega, sino que mantuvo incomunicado a Icardi con sus hijas durante cuatro días. "La señora Nara cosifica a las niñas y las utiliza como herramienta de venganza por la nueva relación del padre", señaló Marcovecchio. También destacó la inconsistencia en el trato hacia el futbolista, afirmando que fue considerado un buen padre mientras Nara viajaba con su pareja, pero repentinamente dejó de serlo.

Además, Marcovecchio denunció que Wanda Nara violó medidas cautelares al exponer conversaciones privadas y publicar imágenes de las menores. "Es una grosera exhibición que solo perjudica a las niñas", concluyó la letrada.