Tiene 21 años y vive en España: así está hoy Camille, la hija de Sancho y Britos

"Tenemos un vínculo hermoso pero a distancia", confió en una nota Christian Sancho cuando le preguntaron por su hija mayor, Camille, fruto de su relación pasada con la actriz Valeria Britos. El modelo y actor, que está en plena gira nacional con la obra Sex viví tu experiencia y que disfruta de su pareja con Celeste Muriega. Papá también de Gael, de su relación pasada con Vanesa Schual, Sancho se reconoce un papá pegote de sus hijos.

Con Camille, particularmente, no tienen la posibilidad de verse a diario puesto que la joven vive en España hace tres años pero sí se comunican por teléfono y están en la diaria aunque sea a través de la tecnología. La chica hoy tiene 21 años y luce muy parecida físicamente a su mamá, Valeria Britos, con quien comparte a menudo fotos en su cuenta de Instagram.

Britos se casó en 2018 con el actor Lionel Campoy y se fueron a vivir a Europa. Crearon la productora Vale hacer Lío y se instalaron en España. Claramente, Camille se fue con su mamá y la pareja y desde entonces trabajan y viven del otro lado del océano Atlántico.

"Después de casarnos con Lio decidimos hacer un viaje a Italia y allí nos encontró la pandemia. Estuvimos seis meses confinados y luego decidimos quedarnos a vivir en España", contó la actriz que en los 90 hizo La nena por Canal 9.

Hace un tiempo, por su parte, Sancho habló de su hija Camille en el programa Vino para vos, que conducía Tomás Dente. "Nuestro vínculo se construyó con mucho esfuerzo, con lo que se podía de entrada porque uno era muy chico para ser padre y se encontraba con ese desafío, esa vorágine, ese vértigo. Era muy chico, muy joven, Valeria también, y nos encontramos con la posibilidad de ser padres de un día para el otro", arrancó el galán.

"Y como yo realmente tuve un padre que me enseñó lo que es el amor por un hijo, en ningún momento me imaginé otra cosa que no sea darle ese amor. Empezamos a criarla, después con el tiempo nos separamos. La separación fue difícil porque eran otros tiempos, otra vida, y a su vez existía el dolor de un padre que no puede estar con su hijo todo el tiempo. Es algo muy difícil de explicar con palabras, que se siente y queda marcado", expresó. /Pronto