Preocupa la salud del perrito que entró a Gran Hermano: temen lo peor

La perrita Paris, la mascota de esta edición de Gran Hermano, generó preocupación en las últimas horas luego de que fuera trasladada fuera de la casa para recibir atención veterinaria.

A una semana de su ingreso al reality, Paris debió ser llevada a la veterinaria para realizarle una serie de estudios médicos. Aunque está en condiciones de convivir con los participantes, su dura historia de vida le dejó secuelas que requieren controles frecuentes.

En redes sociales se viralizó un video en el que Luchi, una de las participantes, le contaba a sus compañeros la situación: "Llevé a Paris al confesionario porque me dijeron que le van a hacer estudios otra vez", dijo con visible preocupación. La noticia generó una rápida reacción entre los seguidores del programa.

El popular tuitero @eeemiliano informó que "Paris vuelve mañana a la casa de Gran Hermano. Está en la veterinaria recibiendo un tratamiento". Y efectivamente, un día después, otro video compartido en X mostró el regreso de la perrita a la casa, aparentemente en buen estado de salud y lista para seguir compartiendo momentos con los jugadores.

Paris ingresó a Gran Hermano el pasado martes 1 de abril como una invitada muy especial. Santiago del Moro la presentó como un símbolo de segundas oportunidades. "Ella es Paris, y hoy su destino cambia. Su historia es la de miles de perritos que esperan un hogar", expresó el conductor en su cuenta de Instagram.

Paris es una galgo de entre 6 y 7 años, rescatada en marzo de 2022 en General Villegas, provincia de Buenos Aires. Estaba embarazada y había sido abandonada en la calle. Tras ser llevada a una veterinaria por vecinos de la zona, recibió atención médica y, dos días después, dio a luz. Sus cachorros fueron rápidamente adoptados, pero ella debió permanecer un tiempo en recuperación.

Por el maltrato sufrido, Paris perdió la visión en uno de sus ojos. Sin embargo, con cuidado, tratamiento y mucho amor, logró recuperarse. Hoy es una perrita sana, tranquila y cariñosa.

Su ingreso a la casa emocionó a todos los participantes. Al ver el video de su historia, varios se quebraron en llanto, y la recibieron con ternura cuando finalmente entró al patio. Aunque al principio se mostró algo asustada, rápidamente se adaptó y comenzó a interactuar con todos. Lucía fue la primera en abrazarla, visiblemente emocionada.

Desde entonces, Paris se convirtió en un miembro más de la casa, recibiendo cariño constante de los jugadores. Su breve salida generó alarma, pero su regreso trajo alivio y alegría a todos.