El cocinero de La Peña del Morfi se levantó de la siesta con un incendio en su casa: "Jamás..."

Flor de susto se llevaron el famoso cocinero Santiago Giorgini y su esposa por el incendio de su casa. El fuego se desató en el lavadero mientras ambos dormían la siesta y por suerte no hubo que lamentar heridos ni daños materiales de consideración.

Cuando ocurrió el siniestro, las hijas del matrimonio no se encontraban en la vivienda. Fue Juli León, esposa del cocinero de La Peña del Morfi, quién relató lo sucedido en su cuenta de Instagram. "¡Estamos sanos y salvos! ¡Estamos vivos! Jamás imaginé que alguna vez tendría que escribir algo así", expresó la mujer.

"Ayer a la tardecita se incendió nuestro lavadero. El motor del secarropas se quemó, empezó a prenderse fuego y siguió propagándose. Nosotros dormíamos la siesta. Las chicas -por suerte- no estaban", agregó la damnificada.

"Los vecinos gritaban y no escuchábamos nada", relató Juli y contó que fue Santiago Giorgini quien se despertó primero y "se despertó aturdido". Acto seguido, la mujer lo siguió y todo lo que veían era humo por lo que el cocinero del ciclo comenzó a apagarlo con el matafuegos.

Si bien sus hijas no se encontraban en la vivienda, la perrita de la familia no aparecía en medio del humo pero, afortunamdamente, estaba bien. "Una pesadilla de esas de las que una se levanta empapada en sudor", añadió la influencer.

Además, reveló que los bomberos le dijeron que "tuvieron muchísima suerte" y que se trató de "una especie de milagro". "Yo creo que mis suegros y mi papá tuvieron mucho que ver. Tenemos tres ángeles de la guarda. Lo sé", continuó.

"Seguimos shockeados pero seguros de algo: que si nos preguntaran ‘¿qué salvarías de tu casa en un incendio?', contestaríamos: ‘Nada de nada. Sólo nosotros' .La vida es un regalo precioso. Gracias, Universo, por dejarnos seguir acá. Y gracias a los mejores vecinos del mundo... ¡los nuestros!", agregó la esposa de Santiago Giorgini.

Para cerrar el posteo que acompañó con una foto de ambos con barbijo, luego de brindar tranquilidad, Juli aprovechó para agradecer a sus vecinos, bomberos, personal policial y al SAME que les brindaron ayuda en el trágico momento. "La casa quedó inhabitada por el hollín. Seguimos muy movilizados, conmovidos y agradecidos", cerró.