Norteña le dio trabajo a su ex compañera del colegio y vivió una pesadilla

La amistad forjada en la escuela entre dos jóvenes santiagueñas de diferentes barrios se vio empañada recientemente por un incidente doloroso. Una de ellas, afectada por la crisis económica que atraviesa el país, solicitó empleo a su amiga, cuya familia posee un almacén en su domicilio.

Después de comenzar a trabajar atendiendo a los clientes hace una semana, surgieron preocupaciones cuando los propietarios notaron una disminución en los ingresos a pesar de la afluencia de clientes. Las discrepancias en el cierre de caja llevaron a sospechar sobre la nueva empleada.

Decidida a enfrentar la situación, la amiga revisó las grabaciones de las cámaras de seguridad y descubrió lo que temía: su ex compañera estaba guardando dinero de las ventas entre sus pertenencias y simulando registros falsos en la computadora. Además, se sospechaba que manipulaba las transacciones de pagos electrónicos para desviar fondos a su cuenta personal.

Con evidencia clara en mano, la joven desleal fue despedida del negocio y se procedió a presentar una denuncia en la Comisaría Nº 45, donde se entregaron todas las pruebas recopiladas contra ella.