Cuatro nuevos multimillonarios surgen cada semana en el mundo, según un informe

Un reciente informe de la ONG Oxfam puso de manifiesto las crecientes desigualdades económicas a nivel global. Según el reporte, el número de multimillonarios alcanzó los 2.769 en 2024, 204 más que el año anterior, lo que equivale a cuatro nuevos súper ricos cada semana.

Mientras las riquezas de estos multimillonarios crecieron en conjunto u$s2 billones durante 2024, la situación de la pobreza global se ha mantenido prácticamente sin cambios desde 1990. Según Oxfam, 3.600 millones de personas -un 44% de la población mundial- viven con menos de u$s6,85 al día, el umbral de pobreza definido por el Banco Mundial.

El informe titulado "El saqueo continúa" destaca que el 1% más rico del planeta controla el 45% de la riqueza global, mientras que las personas en pobreza extrema no han experimentado mejoras sustanciales en décadas. Además, la riqueza de los diez hombres más ricos del mundo creció a un promedio de u$s100 millones diarios en el último año.

"La acumulación extrema se ve impulsada por el poder monopolístico, el clientelismo y, en muchos casos, la corrupción", señala el informe. Según los datos, el 60% de las fortunas de los milmillonarios proviene de herencias o prácticas relacionadas con el poder de mercado.

Oxfam cita casos como el de Jeff Bezos, fundador de Amazon, cuya fortuna asciende a u$s219.400 millones, gracias a que Amazon domina el 70% de las compras online en varios países europeos. Otro ejemplo es Aliko Dangote, el hombre más rico de África, cuyo monopolio en el sector del cemento le ha permitido acumular u$s11.000 millones.

El informe también subraya el impacto de estas desigualdades en los países de ingresos más bajos. Por ejemplo, en 2024, el 1% más rico del norte global extrajo u$s263.000 millones de las naciones del sur global a través de sistemas financieros.

Asimismo, el documento denuncia que cuatro de cada cinco países han reducido presupuestos en educación, salud y protección social, mientras retroceden en fiscalidad progresiva y derechos laborales.

Oxfam concluye con un mensaje claro: si no se toman medidas políticas urgentes para revertir estas tendencias, la desigualdad continuará creciendo en el 90% de los países del mundo. La organización insiste en la necesidad de sistemas fiscales más justos y políticas que redistribuyan la riqueza para combatir esta preocupante disparidad.