Efectivo

Cómo usar el vinagre blanco en la limpieza para eliminar el sarro de la ducha

Para hacer este método casero además de este condimento deberás agregar agua caliente. La solución definitiva y económica para tu hogar.

Equipo de Que Pasa Salta

Investigando diferentes trucos caseros de limpieza, encontramos que uno de los más utilizados por los amantes del orden es el vinagre blanco. En este caso, descubriremos cómo utilizarlo para eliminar definitivamente el sarro que se acumula en la ducha del baño del hogar, de manera sencilla y, sobre todo, muy económica.

El sarro en tu ducha es un problema a resolver.

El agua de tu casa seguramente tiene muchos minerales que provocan que se tape la regadera del baño. Es por eso que hoy te enseñaremos eliminar de manera definitiva y sin complicaciones el problema, con este truco de limpieza.

Para poder desarrollar este método sumamente efectivo, habrá que destapar primero la ducha. Para eso deberás sacarla de su lugar, desmontando la pieza de la ducha y desarmando las partes que se puedan llegar a quitar, de esta manera tendrás la posibilidad de limpiarla con mayor profundidad.

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Otra posibilidad será buscar un recipiente lo suficientemente grande para colocar la ducha en su interior. ¿Cómo seguimos? Preparando una mezcla de agua caliente con vinagre en proporción 1 a 1, lo que significa que, si agregas una taza de agua, también tendrás que agregar una taza de vinagre.

Qué necesitamos para el truco casero con vinagre

· Vinagre blanco.

· Agua caliente.

En un primer momento, deberemos calentar el agua caliente hasta que hierva. Posteriormente, habrá que mezclar el agua caliente con el vinagre. Tendremos que mojar tu ducha en esta preparación. Dejamos reposar por 10 minutos. Es importante limpiar tu regadera tallando las zonas con sarro, y también enjuagar con agua limpia.

Asimismo, los especialistas en limpieza detallan que este truco casero se podrá hacer cuantas veces sea necesario. Para destapar los orificios, lo más aconsejable es tomar un elemento delgado, como una aguja o un palillo.

Otra opción puede ser las cerdas de un cepillo de dientes que ya no uses, que podrán ayudarte a destapar estos orificios. 

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