Las demoledoras profecías del santo Don Orione para la Argentina: el día de la sangre y también la salvación

El sacerdote san Luis o Luigi Orione nació en Italia el 23 de junio de 1872 y, al haber crecido en una familia humilde y trabajadora, conoció desde su infancia la condición de aquellos que estaban en su misma situación.

De esta manera, dedicó su vida a servir para los más humildes, individuos que vivían en la pobreza y también ayudó a personas con discapacidad.

Además de su obra en la tierra, que luego lo llevó a ser beatificado por el Papa Juan Pablo II en 1980 y canonizado por el mismo Sumo Pontífice en 2004, a lo largo de la historia se le adjudicaron una serie de profecías sobre la Argentina.

Cabe mencionar que visitó en dos oportunidades el país, en 1921 y en 1934, donde fundó en la primera visita la comunidad orionita de Victoria, en Buenos Aires.

Las profecías, publicadas en un panfleto que recopiló Félix Lafiandra (h) en su libro "Los panfletos.Su aporte a la revolución libertadora" (como se citó en Giustozzi, 2020), fueron las siguientes:

1.- Violenta y dramática persecución a la Iglesia.

2.- Profanación y destrucción de los templos e Iglesias de la capital.

3.- Correrá el día de la sangre (día trágico para todo el país).

4.- Deceso del Primado de la Iglesia argentina y asesinato de sacerdotes, religiosos y monjas.

5.- Caída de los ídolos de barro endiosados (El presidente perseguidor morirá ahorcado junto a varios de sus correligionarios.

6.- La salvación vendrá como un reguero, del centro de la República Argentina, y de entre tanta sangre, que lavará tanta culpa, nacerá una flor: ‘Una Argentina cristiana y floreciente'.

La paz y la tranquilidad renacerán para una fiesta de la Santísima Virgen y un gran hombre civil católico gobernará el país brillantemente, mientras que un Obispo celoso regirá los espíritus santamente; habrá paz y prosperidad muchos años, pues el Señor se ha acordado de este país desde aquella noche memorable del Congreso Eucarístico de 1934. (Palabras más o menos textuales de Don Orione)".

A su vez, el padre Enzo Giustozzi explica en su libro "Don Orione, Latinoamérica y Argentina", la diferencia entre profecía y predicción.

"La profecía bíblica es primero y ante todo una una invitación a la conversión, un llamado de atención sobre el presente y para los contemporáneos del profeta" (Giustozzi, 2020, p.141).

Por otro lado, a las predicciones las describió como "siempre condicionadas y al servicio del mensaje de conversión".

De esta manera, las predicciones de Don Orione eran conocidas hacía un tiempo en 1954 pero nunca salieron a la luz hasta 1955.

Es así que algunos creen que se anticipó a la Revolución Libertadora que tuvo lugar en Argentina en 1955, donde atribuyen la "destrucción de Iglesias" y la figura de "el dictador" a los hechos que sucedieron en el ámbito político y social del país.

En este sentido, el padre Giustozzi remarca en su libro que todo el material sobre las predicciones fue transmitido oralmente, porque no hay un escrito de Don Orione al respecto.

Además, los testigos presenciales ya murieron, y la "tradición oral" de lo que fue dicho en la actualidad fue corregido y reinterpretado.

"Don Orione fue un verdadero profeta del siglo XX, no tanto por sus "predicciones" (que algunas hizo, claro, aunque no fueron ni "fotográficas" ni "infalibles") sino por su don de leer los "signos y tendencias de los tiempos", de la historia" (Giustozzi, 2020). /Radio Mitre