Sueña con ser ingeniero para sacar a su mamá de la pobreza: la historia de Marcos

Marcos Moreno, un joven de 17 años oriundo de San Ramón de la Nueva Orán, está buscando la ayuda de la comunidad para alcanzar su sueño de estudiar ingeniería civil. A pesar de las dificultades económicas que enfrenta su familia, Marcos se mantiene decidido a continuar su educación y convertirse en ingeniero.

Desde pequeño, Marcos ha superado varios obstáculos. A los 9 años, tuvo que mudarse a Salta para someterse a una operación ocular y, desde entonces, ha permanecido allí con su familia. Con gran esfuerzo, terminó la secundaria y ahora su mayor deseo es estudiar en la universidad.

En una entrevista con Que Pasa Salta, Marcos compartió que su familia no tiene los recursos necesarios para costear los gastos de su educación y que, por ese motivo, ha organizado una rifa solidaria. "Para mí, significa toda la vida. Mi mamá es la persona que más amo en este mundo, y aunque tenemos una vida humilde, siempre me ha apoyado. Sería un orgullo para ella que me reciba como ingeniero", expresó con emoción.

La situación se complicó aún más cuando la empresa donde Marcos planeaba trabajar para ahorrar dinero le dio de baja debido a deudas pendientes. Sin embargo, lejos de desanimarse, Marcos decidió tomar la iniciativa y buscar una solución. Con la ayuda de sus padres, quienes colaboraron con los premios de la rifa, está decidido a juntar el dinero necesario para cumplir su sueño de estudiar en Córdoba.

"Mis padres y hermanos están muy orgullosos de mí. En lugar de rendirme, busqué cómo solucionar el problema y no quedarme sin ir a la universidad. Es un desafío difícil, pero todos en mi familia están haciendo fuerza para que lo logre", relató Marcos, mostrando la determinación que lo caracteriza.

La comunidad de Salta tiene ahora la oportunidad de apoyar a este joven que, con esfuerzo y sacrificio, busca un futuro mejor para él y su familia. Marcos no solo sueña con ser ingeniero civil, sino también con ser un ejemplo para sus hermanos y demostrar que, con perseverancia, todo es posible.