Fue sereno y ahora quedó en la calle sin nada: la triste historia de Ramón

Ramón, un salteño de B° San Benito, enfrenta la peor situación de su vida. Después de trabajar como sereno durante siete años y medio en una vivienda, el propietario apareció de repente y le pidió que abandonara el lugar. Hoy, sus pocas pertenencias están esparcidas en la vereda frente a la casa que cuidó sin recibir remuneración.

"Me sacaron todo esta mañana a las 10. No tengo a dónde ir. Estuve cuidando esta casa por siete años, y nunca me pagaron nada. Ahora me dicen que me tengo que ir. ¿Cómo voy a pagar un alquiler si me sale más de $100.000? No puedo", contó Ramón en un desgarrador testimonio a Que Pasa Salta.

Sin familia y con deudas

Además de la pérdida de su hogar, Ramón enfrenta una estafa familiar. Su sobrina, la única pariente que tenía, utilizó su nombre para solicitar préstamos que ahora él debe pagar. "Son $200.000 más otros $60.000 que tengo que pagar. Yo no tengo nada, ¿cómo hago? Me dejó solo y con deudas".

Vive en la vereda esperando ayuda

Ramón decidió quedarse frente a la casa que cuidó durante años, con la esperanza de que alguien le ofrezca un lugar donde trabajar como sereno. "Voy a quedarme aquí hasta que alguien venga y me diga: 'Viejo, vení, te llevo a un lugar tranquilo.' Eso es lo que estoy esperando".

Los vecinos del barrio San Benito han intentado ayudarlo con comida y abrigo, pero Ramón necesita una solución más permanente. Está ubicado detrás de la iglesia del barrio, en una esquina visible, con sus pertenencias apiladas: una cama, un bolso, una silla y una campera.