"Imputaron a tres policías": el dato que se conoció del joven que murió en el Ragone

Esta mañana, una multitud se reunió frente a Ciudad Judicial para exigir justicia por Lucas Mercado, el joven de 20 años que falleció en circunstancias que aún generan interrogantes. Familiares, amigos y organizaciones sociales marcharon con carteles y reclamos para que se esclarezca el caso que involucra tanto a personal policial como sanitario.

El abogado de la familia, el Dr. Orfeo Maggio, confirmó que tres efectivos policiales están imputados en la causa. "Estamos pidiendo que el gobernador instruya a sus ministros de Seguridad y de Salud Pública para que inicien los sumarios administrativos correspondientes, al margen de lo que surja del expediente judicial", expresó el letrado.

Los hechos

El caso ocurrió en la madrugada del pasado 3 de enero, cuando Lucas, quien estaba judicializado por su problemática de adicción, acudió al Hospital Dr. Miguel Ragone en busca de ayuda. Según testimonios, el joven no fue atendido por no ser paciente del establecimiento y fue derivado al Hospital San Bernardo. En ese momento, intervino la Policía y separó a Lucas de su madre.

La madre, quien fue retenida en la Comisaría 9, señaló que se enteró de la muerte de su hijo al dirigirse al hospital Ragone luego de una larga espera sin respuestas. Allí, reconoció a Lucas al observar su cuerpo con esposas y visible estado de abandono.

"Lo que llama poderosamente la atención es qué pasó en esa hora que el chico estuvo solo en el patrullero. Subió completamente sano y luego apareció lastimado", cuestionó Maggio.

Lesiones y sospechas

El abogado también destacó que, según la autopsia, el cuerpo de Lucas presentaba lesiones compatibles con una agresión, incluyendo marcas de esposas y heridas visibles. "En algún momento, la misma Policía reconoció que hubo resistencia y una discusión con golpes de por medio. Estamos en presencia de un homicidio culposo y abandono de persona seguido de muerte", afirmó.

Además, la familia exige explicaciones sobre por qué el joven permanecía esposado en el hospital, una medida que consideran excesiva y negligente.

Reclamo de justicia

La marcha busca visibilizar el caso y presionar a las autoridades judiciales para que avancen en la investigación. "Estamos pidiendo respuestas claras. Este chico era un adicto en tratamiento, que buscó ayuda y terminó muerto. Esto no puede quedar impune", concluyó Maggio.

La Fiscalía Penal de Graves Atentados contra las Personas continúa investigando el caso, mientras crece la demanda social por un esclarecimiento inmediato de los hechos.