Jubilado salteño creó una gomería móvil para salir de la depresión

A sus 63 años, Miguel Ángel Gómez, jubilado de enfermero en Salta, enfrentó una dura transición al dejar de trabajar. Después de sufrir dos infartos y jubilarse dos años antes debido a un accidente, se encontró lidiando con la depresión al sentirse perdido sin una actividad que le diera sentido a su vida.

En una entrevista con Infobae, Miguel Ángel compartió su historia de superación y cómo encontró un nuevo propósito. A pesar de los momentos difíciles que vivió, incluida la pérdida de su esposa en un trágico accidente, siempre supo salir adelante, siendo el trabajo su principal motor.

Después de seis meses de jubilación, el 28 de abril pasado, surgió la idea que cambiaría su vida: comenzar un emprendimiento de reparación de motos a domicilio. Lo llamó "gomería móvil" y, según él, no es solo un trabajo o un hobby, sino una forma de mantener su salud mental.

Miguel Ángel, nacido y criado en Salta, recuerda su infancia marcada por carencias materiales junto a su madre y hermanos. A pesar de las dificultades, siempre valoró los momentos felices y aprendió la importancia de la solidaridad desde joven.

Después de superar obstáculos para completar sus estudios secundarios, comenzó la carrera de enfermería, una profesión que lo apasionaba. Sin embargo, su vida dio un giro trágico cuando sufrió un accidente en el que perdió a su primera esposa.

Después de intentar continuar con sus estudios, decidió inscribirse en la Escuela Ramón Carrillo para estudiar enfermería como una manera de agradecer y devolver lo que el sistema de salud le habían brindado tras el accidente. A lo largo de su carrera como enfermero, Miguel Ángel experimentó momentos gratificantes pero también angustiantes, sufriendo incluso dos infartos que requirieron cuidados y reposo. 

La jubilación fue un momento difícil para él, ya que se sintió inútil al no tener una ocupación. Fue el 28 de abril pasado cuando decidió emprender el camino de la "gomería móvil". Comenzó ofreciendo servicios de reparación de motos a domicilio. Gracias a la promoción en redes sociales, y el boca a boca, su emprendimiento se convirtió en un éxito.

El trabajo no solo le devolvió la alegría, sino que también le brindó la oportunidad de llevar a cabo acciones solidarias. Junto a otros motoqueros, distribuye regalos y caramelos a los niños de los barrios salteños disfrazados de Papá Noel, una tradición que ha adoptado para agradecer a la comunidad que lo apoya.