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[ATENCIÓN] Cómo evitar el dolor de panza después de la cena de Fin de Año

Expertos en nutrición sugieren optar por preparaciones frescas y livianas.

Con la llegada de las Fiestas de Fin de Año, las altas temperaturas de la temporada estival invitan a replantear los menús tradicionales cargados de calorías y grasas. Expertos en nutrición sugieren optar por preparaciones frescas y livianas, no solo para disfrutar de una cena más saludable, sino también para prevenir malestares asociados al exceso de comida o la descomposición de alimentos por el calor.

Alternativas para la mesa festiva

En lugar de los típicos platos pesados, se recomienda incorporar ensaladas variadas y carnes magras como pescado, pollo, pavo o conejo. Para los postres, opciones a base de frutas frescas resultan ideales, brindando frescura y ligereza a la mesa familiar.

Asimismo, se aconseja disminuir el consumo de frutas secas, budines, garrapiñadas y turrones, alimentos hipercalóricos que, aunque tradicionales, no son los más recomendables para estas fechas. Moderar las porciones y planificar con anticipación el menú son medidas clave para evitar excesos.

Higiene y conservación, esenciales

Uno de los aspectos más importantes durante las Fiestas es garantizar la higiene y conservación de los alimentos. Cortar la cadena de frío o mantener las comidas al aire libre puede favorecer la descomposición y provocar enfermedades.

Especial atención deben prestar las familias con niños pequeños o adultos mayores, quienes son más vulnerables a intoxicaciones alimentarias.

Entre las recomendaciones principales:

  • Evitar preparaciones con cremas o mayonesas.
  • Cocinar la cantidad justa para evitar sobras.
  • Extremar la higiene en la cocina y prevenir contaminaciones cruzadas.

Consejos para disfrutar de forma saludable

Para evitar molestias estomacales y disfrutar plenamente de las celebraciones, se recomienda:

  • No realizar ayunos prolongados antes de la cena. Consumir un desayuno, almuerzo y merienda livianos.
  • Beber agua o jugos naturales durante la comida y limitar el consumo de bebidas alcohólicas.
  • Elegir platos preferidos en porciones moderadas y comer lentamente para favorecer la saciedad.
  • Optar por postres frescos como ensaladas de frutas o helados bajos en calorías, dejando de lado los que contengan cremas o chocolate.

El día posterior a las celebraciones, la hidratación es clave. Se aconseja consumir frutas y verduras frescas, mantener una alimentación equilibrada y evitar ayunos prolongados.

Con estas medidas, las Fiestas pueden ser una ocasión para disfrutar sin descuidar la salud ni el bienestar general.

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