Casimiro, el abuelo salteño de 87 años que limpia todos los días una plaza que él creó

 En el tranquilo municipio de Cerrillos, un hombre de 87 años se ha convertido en un verdadero héroe. Don Casimiro, como lo conocen afectuosamente los vecinos, ha dedicado incansables esfuerzos a limpiar y transformar un antiguo y abandonado espacio ubicado junto a las vías del tren.

Desde tempranas horas de la mañana, Don Casimiro se levanta con determinación para enfrentar la tarea que ha adoptado como propia. Este lugar, que solía ser un refugio para víboras, alacranes y sapos, ahora brilla con un resplandor renovado gracias al trabajo arduo y constante de este admirable vecino.

"No podíamos dejar que este espacio se perdiera en el olvido y se convirtiera en un peligro. Don Casimiro ha demostrado una dedicación inigualable al mantener este lugar limpio y seguro para todos nosotros", comentó a Que Pasa Salta una vecina que frecuenta la plaza.

El cambio es evidente: lo que antes era un lugar desolado y temido, ahora se ha transformado en una hermosa placita que disfrutan varios niños todos los días. Los más pequeños juegan sin preocupaciones, las familias pasean con sus mascotas y los ancianos disfrutan del aire fresco bajo la sombra de los árboles, todo gracias al trabajo incansable de Don Casimiro.

Ante semejante muestra de generosidad y compromiso, los vecinos han iniciado una petición para que la plaza lleve el nombre de Don Casimiro en su honor. Además, han expresado su deseo de rendirle un homenaje público para agradecerle por su valiosa contribución a la comunidad.