Fuerte tensión en Bolivia: "Arcistas" y "Moralistas" se enfrentan en plena calle

Bolivia vivió este domingo un día de alta tensión debido a los enfrentamientos entre los simpatizantes del presidente Luis Arce y los del exmandatario Evo Morales. Estos choques ocurrieron en el marco de la "Marcha para Salvar Bolivia", convocada por Morales para exigir su habilitación como candidato en las elecciones de 2025.

Los primeros enfrentamientos se produjeron en el Cruce de Ventilla de El Alto, donde los seguidores de Morales se enfrentaron a los afines a Arce utilizando petardos, piedras y explosivos, según informó el periódico boliviano Los Tiempos. Estos incidentes dejaron al menos tres personas heridas y varios periodistas amedrentados.

El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, declaró: "Estos sectores agresivos atacaron un cabildo que se desarrollaba en Ventilla, dejando al menos tres personas heridas y varios periodistas amedrentados". Del Castillo acusó a Morales de seguir un plan para llenar de sangre y muerte a Bolivia y aseguró que el Gobierno actuará conforme a la Constitución.

La movilización liderada por Morales llegó este domingo a la comunidad de Achica Arriba, a 35 kilómetros de La Paz. Morales declaró: "Ya estamos a un día de la ciudad de La Paz (...) Ahora nos toca descansar, mañana un esfuerzo más. El pueblo vuelve para recuperar su revolución". La marcha comenzó el martes en la localidad de Caracollo, en la región andina de Oruro.

En previsión de la llegada de los manifestantes a La Paz, se reforzó el contingente policial y se cerraron los accesos a la plaza Murillo y a la sede de la Central Obrera Boliviana (COB). Sectores afines a Arce están preparándose para detener esta marcha en la ciudad de El Alto.

El sector de Morales denunció amenazas contra la integridad física y la libertad del exmandatario en una carta remitida a la ONU. En respuesta, el Gobierno de Arce envió cartas a tres organismos internacionales para denunciar "actos de desestabilización" por parte de Morales y sus seguidores. Las cartas fueron enviadas al secretario general de la ONU, António Guterres; al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk; y a la secretaria ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Tania Reneaum Panszi.

Evo Morales, quien fue presidente de Bolivia desde 2006 hasta 2019, mantiene una significativa influencia política y social en el país. Su relación con Luis Arce, quien fue su ministro de Economía y luego lo sucedió en la presidencia, fue tensa desde que Arce asumió el cargo en 2020. Las diferencias ideológicas y estratégicas entre ambos líderes generaron fricciones que ahora se manifiestan en una abierta confrontación.