Senadores negocian a contrarreloj mejorar la jubilación que propuso Milei

El Senado de la Nación se reunió este jueves para abordar dos temas cruciales de la agenda parlamentaria: la reforma jubilatoria y el aumento de dietas a los senadores. Además, se aprobó por unanimidad un proyecto que tipifica penalmente la sustracción y comercialización de menores.

En el inicio de la sesión, se decidió postergar para una próxima reunión el tratamiento del proyecto sobre financiamiento universitario, que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados. También se acordó priorizar el análisis de la situación de los tomadores de créditos UVA, mediante una iniciativa que obtuvo dictamen en septiembre del año pasado.

La sesión continuó con la aprobación de pliegos diplomáticos, el traspaso de bienes patrimoniales a las provincias y la adhesión al tratado internacional de Remoción de Restos de Naufragio. Posteriormente, se inició el debate sobre el Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones, un proyecto que ya cuenta con media sanción de Diputados tras un acuerdo entre diferentes sectores de la oposición. Se espera que la propuesta obtenga la aprobación definitiva en el Senado.

El proyecto de reforma jubilatoria propone una combinación entre el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE), con un ingreso extra del 8,1% para los jubilados y una recomposición de los fondos jubilatorios adeudados a las provincias por parte de la Nación, por un monto de $703.515 millones.

Pese al optimismo de la oposición en el Congreso, el presidente Javier Milei ha advertido que vetará cualquier reforma que comprometa el equilibrio fiscal. Actualmente, está en vigor un sistema jubilatorio implementado por el propio presidente a través de un decreto de necesidad y urgencia (DNU). En este contexto, La Libertad Avanza presentó un dictamen propio que respalda la fórmula establecida por el decreto presidencial.

Durante el debate en el Senado, Martín Lousteau, senador radical, criticó el enfoque de Milei para alcanzar el superávit fiscal: "El Presidente dijo que se le fue la mano con el ajuste, pero cuando se le va la mano, hay gente que no puede vivir", señaló Lousteau, quien enfatizó que la reforma intenta compensar las pérdidas sufridas en enero de este año.

Carmen Álvarez Rivero, senadora cordobesa del PRO, se alineó con el oficialismo, aunque con reservas: "Lo que varios de mis colegas van a hacer hoy es un error. No hay duda de que a los jubilados lo que más les conviene es que no haya inflación; a su edad, no pueden seguir surfeando los precios como estamos acostumbrados en Argentina. Hoy estamos viendo bajar la inflación, que es casi un milagro sostenido por pequeños fósforos; cuando prendemos uno, se cae otro".

Por su parte, Cristina López, senadora de Unión por la Patria, pidió a los jubilados "que le recuerden al mentiroso de Milei una de las tantas promesas falsas que hizo, porque los jubilados no son la casta". López también solicitó al presidente que no vete el proyecto cuando llegue a sus manos.

En la misma línea, Mariano Recalde, senador porteño del mismo bloque, criticó la postura del presidente: "Resulta que destinar una parte del presupuesto para atender una necesidad imperiosa como es el haber de los jubilados y pensionados es un acto degenerado para el Presidente". Recalde recordó que la iniciativa tiene un costo fiscal del 0,4% del PBI, el mismo que implicó la modificación del impuesto a los Bienes Personales y a la riqueza aprobada en el Congreso. "No se trata de un problema de falta de recursos, sino de cómo se destinan", concluyó.