El Gobierno oficializó nuevo reglamento para el uso de armas de fuego

El Gobierno Nacional ha oficializado un nuevo reglamento de uso de armas para las fuerzas federales en respuesta a la escalada de violencia narco en Rosario y a una serie de incidentes de inseguridad en los que efectivos policiales se han visto involucrados en el uso letal de armas contra ladrones. La Resolución 125/2024, publicada en el Boletín Oficial, establece pautas claras para el empleo de armamento por parte de los miembros de las fuerzas de seguridad.

Según la resolución, los funcionarios policiales y de seguridad federales solo podrán hacer uso de armas de fuego cuando resulten ineficaces otros medios no violentos y en situaciones específicas, como en defensa propia o de terceros ante peligro inminente de muerte o lesiones graves, para prevenir la comisión de delitos graves que representen amenaza para la vida de las personas, o para detener a quienes representen un peligro inminente y se resistan a la autoridad.

El reglamento también detalla circunstancias en las que la identificación como personal policial antes del uso de armas no será necesaria, como cuando implicara un riesgo mayor para la vida del funcionario o cuando fuera inadecuada dadas las circunstancias del caso.

Asimismo, la resolución establece que en casos de lesiones o muerte derivadas del uso de armas, se deberá prestar asistencia médica a las personas afectadas y comunicar de manera inmediata los hechos a la autoridad judicial competente, así como a los parientes o amigos íntimos de las personas afectadas.

El nuevo reglamento también incluye pautas para determinar situaciones de peligro inminente y clarifica que los funcionarios de las fuerzas federales no podrán ser sujetos a medidas administrativas o disciplinarias que restrinjan su desarrollo laboral mientras se determina que su accionar se ajustó al reglamento.

Con esta medida, el Gobierno busca garantizar una respuesta adecuada por parte de las fuerzas de seguridad frente a situaciones de emergencia, respetando los derechos humanos y la dignidad de todas las personas involucradas.