Paro nacional universitario: "El 85% de los docentes están bajo la línea de pobreza"

Diego Maita, secretario de la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Salta (ADIUNSA), expresó su preocupación por la situación salarial de los docentes en una reciente entrevista en el programa "Somos la Mañana".

Maita señaló que el paro convocado por el gremio ha tenido un fuerte impacto, con un 80% de adhesión en la Universidad Nacional de Salta (UNSa). Sin embargo, mostró su descontento con la falta de una oferta salarial significativa por parte del gobierno. 

"Después de dos meses sin paritarias, nos ofrecieron un aumento del 3% para agosto y un 2% para septiembre, lo que ha causado un profundo malestar entre los docentes, casi como una burla", comentó.

El secretario de ADIUNSA enfatizó la pérdida del poder adquisitivo que han sufrido los docentes universitarios. "Entre diciembre y agosto, hemos perdido 50 puntos salariales y solo nos ofrecieron un 5% de aumento en dos meses, es algo insultante", afirmó. 

Además, criticó que los sueldos en las universidades nacionales sean los más bajos del país en comparación con otros niveles educativos.

Ante esta situación, Maita adelantó que el paro podría continuar la próxima semana, con una duración mínima de 48 horas, si no hay una mejora en la propuesta del gobierno. "Nos reuniremos en asamblea para evaluar la situación, y si no recibimos una respuesta satisfactoria, es probable que extendamos la medida de fuerza", advirtió.

Actualmente, solo el 20% de las aulas en la UNSa están funcionando, y Maita no descarta la posibilidad de una paralización total de actividades si no se produce una recomposición salarial adecuada. "Estamos siendo arrinconados, y si el gobierno no da una respuesta, eventualmente tomaremos medidas más drásticas, como la suspensión total de actividades, tal como ocurrió en 2018 y 2005", concluyó.

La situación se agrava considerando que, según Maita, el 85% de los docentes de la UNSa se encuentran bajo la línea de pobreza, y la mitad de ellos incluso por debajo de la línea de indigencia. Además, mencionó que, a pesar de tener 23 años de antigüedad, su salario apenas alcanza los 600 mil pesos, muy por debajo del índice de pobreza que ronda los 900 mil pesos.

Finalmente, Maita sugirió que todo aumento salarial futuro debería estar en línea con la inflación mensual para evitar seguir perdiendo poder adquisitivo.