A pesar de las amenazas, González Urrutia visitó a Milei y salió al balcón de Casa Rosada

Este sábado, en la Casa Rosada, el venezolano, Edmundo González Urrutia, fue recibido por el presidente argentino Javier Milei en una audiencia que duró casi media hora. Este encuentro, en el marco de la creciente tensión política en Venezuela tras las elecciones presidenciales de julio de 2024, marcó el respaldo argentino a González Urrutia, quien es reconocido por el gobierno de Argentina como el presidente electo, a pesar de la autoproclamación de Nicolás Maduro como vencedor de los comicios.

La reunión se desarrolló en un contexto de alta tensión política, tanto en Venezuela como en la relación entre Argentina y el régimen de Maduro. Las polémicas elecciones presidenciales, que dejaron a Maduro y González Urrutia como rivales proclamados, continúan siendo un tema candente. Mientras Maduro se autoproclamó vencedor sin presentar las actas que lo validen oficialmente, González Urrutia, que vive en el exilio, se reivindica como el ganador con el 67% de los votos.

Además, en el plano diplomático, las relaciones entre ambos países se deterioraron luego de que el gobierno argentino reconociera a González Urrutia y denunciara un "fraude masivo" perpetrado por el régimen chavista. Esta postura llevó a la expulsión del cuerpo diplomático argentino de Venezuela y a un clima de creciente tensión, especialmente luego de la detención del gendarme argentino Nahuel Gallo en Caracas, cuyo estado de salud se desconoce.

Al finalizar el encuentro en la Casa Rosada, Milei invitó a González Urrutia a salir al histórico balcón que da a la Plaza de Mayo. Allí, los esperaban centenares de venezolanos residentes en Argentina, quienes mostraron su apoyo al líder opositor. Junto a González Urrutia y Milei, también estuvieron la esposa del presidente, Mercedes López, el ministro de Relaciones Exteriores, Gerardo Werthein, y la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, quien tuvo un emotivo encuentro con López.

Mientras se aproxima el 10 de enero, fecha en la que según la Constitución venezolana el nuevo presidente debe asumir, tanto Maduro como González Urrutia continúan reclamando el triunfo en las elecciones. En respuesta a la situación, Maduro ofreció una recompensa de 100.000 dólares por información que conduzca a la captura de González Urrutia, quien, desde su asilamiento en España, manifestó su intención de regresar a Venezuela para asumir la presidencia el día de su proclamación.

Este apoyo de Argentina a González Urrutia y las tensiones diplomáticas con el gobierno de Maduro marcan un punto álgido en las relaciones bilaterales, especialmente por la reciente expulsión de la diplomacia argentina de Venezuela. La situación sigue siendo compleja y podría tener repercusiones adicionales en la política exterior de ambos países en los próximos días.