El ajuste de Milei puso en jaque la continuidad de varias obras en la UNSa

La Universidad Nacional de Salta (UNSa) enfrenta una difícil situación con la paralización de siete obras importantes, incluida la construcción de un edificio para la Facultad de Ingeniería. Esto ha generado preocupación entre autoridades universitarias, ya que los proyectos que estaban fijados corren el riesgo de quedar inconclusos.

Las autoridades de la UNSa han expresado su malestar, ya que la suspensión de las obras, que debieron haberse terminado en 2023, afecta gravemente a la infraestructura universitaria. A pesar de los reclamos formales, desde el Ministerio de Economía de la Nación han señalado que las obras en universidades "no son una prioridad", lo que muchos interpretan como una decisión política, detalló El Tribuno.

Incluso el gobernador Gustavo Sáenz se ha pronunciado al respecto, criticando las medidas adoptadas por el gobierno nacional. La situación se agrava con la suspensión de la construcción de 12 nuevos establecimientos educativos en la provincia, destinados a los niveles inicial, primario, secundario y superior no universitario, cuya ejecución quedó detenida tras la asunción del presidente Javier Milei.

Obras inconclusas y demandas de financiamiento

Entre las obras paralizadas se encuentra el edificio para la Escuela de Ingeniería Electromecánica, que debió finalizarse en mayo de 2023 pero actualmente presenta solo un 35% de avance. Este proyecto, que contemplaba una superficie de 2235 m² y fue licitado en 2021 por 207 millones de pesos, se financió a través de la CAF (Cooperación Andina de Fomento). Sin embargo, la empresa a cargo no cumplió con los plazos establecidos.

El secretario de Obras, Servicios y Mantenimiento de la UNSa, Edgardo Sham, explicó que "aunque los fondos fueron desembolsados en tiempo y forma, la empresa no cumplió con sus obligaciones, lo que llevó al rector Daniel Hoyos a rescindir el contrato" El ingeniero Sham destacó que actualmente solo se ha construido la estructura del edificio, y la obra está paralizada desde entonces.

A esta problemática se suma el contexto de desfinanciamiento que enfrentan las universidades públicas en el país, tras el veto de la Ley de Financiamiento Universitario. Esto ha desencadenado protestas, tomas y clases abiertas en varias universidades públicas, incluyendo la UNSa, que teme un avance hacia el arancelamiento y posterior privatización de la educación superior.