El acuerdo con el Fondo Monetario y las medidas: lo bueno y lo malo

El acuerdo con el FMI tiene aspectos positivos y negativos.

Por un lado, trae tranquilidad a los mercados al convalidar nuevas metas de cumplimiento y contemplar un déficit fiscal del 2,0% del PBI para el año 2023, lo cual se espera que genere mayor estabilidad en la economía. Además, la aprobación del acuerdo por parte del FMI podría evitar una corrida hacia los dólares alternativos y brindar cierta previsibilidad a corto plazo.

Sin embargo, el acuerdo también implica una mayor presión tributaria que afectará al consumo. El aumento de impuestos, incluyendo un adelanto extraordinario de impuesto a las ganancias para grandes empresas y la aplicación de impuestos al tipo de cambio, puede llevar a un aumento de los costos y encarecer muchos productos. Esto podría tener un impacto negativo en las ventas y en el poder adquisitivo de los ciudadanos.

Además, se espera que el dólar ahorro y otros dólares financieros suban debido a las medidas fiscales, lo que podría aumentar la inflación futura. La escasez de dólares y la abundancia de pesos también pueden mantener el escenario recesivo, y el consumo se verá afectado por la aparición de nuevos impuestos.

En términos de vencimientos, Argentina deberá hacer frente a pagos importantes al FMI en los próximos meses, lo que puede generar preocupación sobre la capacidad del país para cumplir con estas obligaciones financieras.

En resumen, el acuerdo con el FMI brinda cierta estabilidad a corto plazo, pero también implica desafíos económicos que podrían afectar al consumo y generar incertidumbre en el futuro. Cada sector de la economía deberá adaptarse y rearmar su estrategia para enfrentar este escenario complejo hasta la llegada del próximo gobierno.

Fuente: Salvador Di Stefano - Analista Económico.