Desbarataron una fiesta clandestina en Villa Angelita: había policías borrachos

Cero autoridad moral. Según un parte policial que comenzó a circular desde temprano en las redes sociales, a las 2.30 ingresó al sistema de emergencias del 911 un llamado denunciando ruidos molestos y posible fiesta clandestina. Por lo que una patrulla se hizo presente en el lugar y se llevó flor de sorpresa. Como en Olivos, 'haz lo que yo digo, no lo que yo hago'.

La casa estaba ubicada en el pasaje Teresa de Calcuta primer cuadra, en Villa Angelita. Ya en el lugar, los policías se dieron con un nutrido grupo de personas, en su mayoría varones, quienes efectivamente estaban de fiesta. Lo que generó sorpresa y bronca fue que el organizador del evento era un aspirante a agente de la Policía, identificado como Albaizeta.

A ello, siguió otra escena aún más escandalosa, pues al comenzar a recorrer los ambientes de la vivienda, no sólo se pudo ver las botellas con restos de bebidas alcohólicas, sino que varios de los concurrentes tenían el corte de pelo propio de integrantes de la fuerza policial. Acto seguido, quienes estaban de turno empezaron a pedir identificaciones a los participantes.

De esta manera, se pudo establecer primero la presencia en la fiesta clandestina de los agentes y aspirantes de distintas delegaciones. Ellos son: Carlos Chocobar y Guadalupe Ríos, Diego Cáceres, Fernando Sandoval, Nadia Leañez y Yamila Lacci, Sergio López. Pero ellos no eran todos.

Una joven presente en estado de ebriedad, alertó a los policías sobre una habitación en la que se habían encerrado otro grupo. Al abrir la puerta de la pieza, había siete personas que estaban en profundo silencio. Nicolás Barboza, Daiana Alderete, Victoria Corvalán, Sofía Alvaro, Rosario Alvarado, Omar Aguirre y Yesica Casimiro.

Así, se contabilizaron siete policías y ocho aspirantes, lo que suman quince representantes de la fuerza policial en clara infracción. La novedad, que contó con el ingrediente de que algunos efectivos no pudieron recordar sus números de legajos debido al estado de ebriedad que presentaban, no pasó desapercibida.