Policía salteño sacó el arma e intentó hacer lo peor en la comisaría: "Me quiero..."

La noche del lunes, en una comisaría de la zona oeste de Salta, se vivió un episodio alarmante protagonizado por un efectivo policial que estaba en servicio de 21:30 a 06:30. 

Según informes de HolaSaltaNoticias, cerca de las 22:30, una sargento observó a su compañero con una mochila frente al mueble donde se guardan las armas reglamentarias. Lo que habría llamado la atención de la sargento fue que el policía dejó la puerta del mueble abierta y se retiró apresuradamente, lo que despertó sospechas.

Al realizar un control del armamento, la sargento descubrió la falta de una pistola Bersa Thunder 9 mm, que pertenecía a un oficial que estaba de licencia médica. Aunque el policía negó insistentemente haber tomado el arma, esta habría sido hallada en uno de los cajones del escritorio de la guardia de la comisaría.

Lo que en un principio se pensó que era un caso de robo, pronto habría revelado una realidad más perturbadora. Ya en la madrugada del martes, el policía, en medio de una crisis nerviosa, confesó entre lágrimas que su intención era quitarse la vida esa noche. Explicó que no quería hacerlo en su domicilio para evitar que su padre, con quien vive, lo descubriera y sufriera.

El policía manifestó que desde hace dos años enfrenta falsas denuncias de su expareja, las cuales, según él, afectaron gravemente su vida personal y laboral. La intervención oportuna de sus compañeros evitó una tragedia.

El caso se encuentra bajo secreto de sumario, y el policía fue trasladado para recibir atención especializada. Las autoridades continúan investigando este delicado y preocupante incidente, que ha conmocionado a toda la comisaría.