Policía norteño hizo lo peor a su exsuegra y a su bebé: tomó la peor decisión

Un caso estremecedor conmociona a Santiago del Estero. Nicolás David Ábalos, un policía, asesinó a balazos a su hija de un año y a su exsuegra antes de quitarse la vida. El dramático suceso ocurrió el viernes por la noche en el barrio Triángulo de Monte Quemado.

Según los informes locales, Lorena Navarro, de 38 años y docente, acudió a la casa de su expareja, Nicolás Ábalos, para recoger a su hija Bianca, de un año y siete meses. La vivienda se encontraba diagonal al domicilio de los padres de Navarro.

Se desconoce cómo inició el ataque, pero se manejan dos hipótesis: una discusión que se desató en el lugar o un ataque premeditado por parte de Ábalos. Lorena Navarro salió corriendo de la casa de Ábalos y cruzó la calle para pedir ayuda a sus padres, con el policía persiguiéndola con una pistola en mano. Causó una masacre. 

Al ingresar a la vivienda de los padres de Navarro, Ábalos desató una balacera. Mató a su hija Bianca y a su exsuegra Olga Cuellar, de 62 años, quien intentó esconderse detrás de una puerta. También baleó en la cara a su expareja y en el abdomen a su exsuegro, Víctor Navarro, de 64 años. El hijo de 9 años de la pareja también resultó herido.

Después del ataque, Ábalos salió a la vereda buscando al niño, quien había escapado corriendo. Al ver a un vecino, Ábalos intentó dispararle, pero el hombre logró esconderse. Finalmente, el policía se disparó en el mentón frente al almacén de sus exsuegros, muriendo en el acto.

Los cuerpos de Olga Cuellar y Bianca fueron trasladados a la morgue judicial y luego entregados a la familia. El cuerpo de Ábalos fue retirado por sus familiares y sepultado en la ciudad del departamento Copo. Esta tragedia dejó una profunda conmoción en Santiago del Estero.