Los acusaron de chorros y nada que ver: familia salteña vivió un infierno

Una familia humilde de zona sur vivió este domingo un momento de verdadera tensión luego de que se apersonaran patrulleros y varios efectivos para efectuar una requisa. Según contaron a Que Pasa Salta, los uniformados querían ingresar por la fuerza, sin orden judicial, supuestamente por un ilícito en el supermercado Vea. 

"Vinieron cinco móviles de la Policía y querían entrar a toda costa. Acusaban mi hijo y mi hermano de haber robado en el supermercado. Dijeron que supuestamente los habían identificado por las camperas que tenían y nada que ver. Ellos volvieron de una juntada y por suerte tenían pruebas de que los horarios no coincidían", relató una de las residentes del domicilio en cuestión. 

  Lo cierto es que no pudieron comprobar delito alguno y los jóvenes acusados no pudieron ser detenidos ya que no había pruebas de que fueran ellos los autores de lo ocurrido en el supermercado de barrio San Francisco.   

La joven contó además que los policías no tenían orden de allanamiento y que al ver el material registrado por uno de los chicos acusados, que demostraban que estaban en otro lugar a la hora señalada, no tuvieron más que hacer que retirarse. Lo polémico del operativo fue que provocaron una tensión desagradable, aparentemente fuera de todo protocolo. 

"Mi mamá sufre mal de Parkinson y la pasó muy mal, casi se descompensa con lo ocurrido. Somos una familia laburante. Creen que porque nuestra casa está en mal estado somos delincuentes y nada más alejado de eso. Nadie pidió disculpas", reclamó.