Los fiscales temen lo peor: así planificaba y espíaba a todos el terrible sicario de Salta

El procurador general de la provincia de Salta, Pedro García Castiella, solicitó al ministro de Seguridad de la provincia, Marcelo Domínguez, el refuerzo de la seguridad en las oficinas de las fiscalías debido a la exposición de hechos y planes delictivos de organizaciones criminales en el norte provincial.

Los expedientes revelan pruebas de espionaje e inteligencia realizados por Cristian "Gringo" Palavecino en las fiscalías penales de Orán y en las instalaciones del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF).

Se descubrió que Palavecino operaba con un alto nivel de organización, incluyendo anillos de seguridad y armamento de guerra, como fusiles FAL y ametralladoras. Se encontraron más de 1.400 fotos de diferentes domicilios y vehículos en sus teléfonos.

La solicitud de refuerzo de seguridad está relacionada con pruebas recopiladas en la investigación del homicidio de Alejandro Avandillo, que incluye elementos relevantes para otros casos, como un robo calificado en perjuicio de la empresa Abra de Sol. Se encontraron fotografías de edificios que albergan las fiscalías penales, el CIF de Orán y elementos cercanos a los balcones, lo que sugiere actividad de inteligencia por parte de una organización criminal.

La situación está siendo investigada por la Unidad Fiscal de Litigio Estratégico contra el Crimen Organizado del Norte, integrada por varios fiscales.

"El material descubierto consiste en diversas fotografías de los edificios que albergan las fiscalías penales, del CIF de Orán, edificios contiguos y postes de alumbrado público cercanos a los balcones de uno de los edificios, elementos que se encontraban en las extracciones telefónicas de los aparatos celulares secuestrados, lo que sugiere una posible actividad de inteligencia y seguimiento por parte de una organización criminal", detallaron desde el MPF.

Cristian "Gringo" Palavecino fue detenido en Orán después de estar prófugo desde 2017. Fue imputado por tentativa de homicidio doblemente calificado y por su presunta participación en el homicidio de Raúl Fernando Martínez en 2017. Estos casos involucran ataques violentos y asesinatos en la región.

Palavecino está imputado también como participe de un crimen y de un intento de homicidio en 2017, por su vinculación con Raúl Ricardo "Coya" Rojas, reconocido en el narcotráfico de Salta y acusado como el líder de la banda de los sicarios. Era "el prófugo más buscado del norte argentino", y el procurador García Castiella, lo citó como ejemplo de "crimen organizado" y agregó: "Es un denominador común en varias investigaciones".

Debido a las fotos encontradas en su teléfono con los espionajes realizados a las fiscalías y diversos domicilios en el Norte, los fiscales temen por su vida y piden mayor seguridad.