Narcopolicías: la reconocida marca que tenía la droga secuestrada por Gendarmería

En un operativo realizado por el Escuadrón 54 de Gendarmería Nacional en Aguaray, Salta, se incautaron 420 kilos de cocaína de máxima pureza, transportada por tres oficiales de la Policía de Salta.

Una fotografía obtenida por El Tribuno muestra uno de los ladrillos de cocaína con el sello de un "Delfín", perteneciente a Reynaldo Castedo. Esta marca es sinónimo de calidad y es utilizada por el Clan Castedo, que opera principalmente en el paso fronterizo entre Bolivia y Argentina.

 Este evento destapó una conexión alarmante entre los efectivos policiales y el narcotraficante Reynaldo "Delfín" Castedo, quien, a pesar de estar detenido, continúa ejerciendo influencia sobre el tráfico de drogas en la región.

Reynaldo Castedo, detenido por narcotráfico y por ser el autor intelectual del asesinato de Liliana Ledesma, una pequeña productora rural que denunció públicamente a los narcos, y éstos le quitaron la vida cruelmente. La justicia federal de Salta apunta a una convivencia entre algunos miembros de la Policía de Salta y el narco Castedo, sugiriendo que la influencia del capo narco se extiende más allá de las rejas.

La incautación de la droga y la conexión con Castedo desencadenó una serie de investigaciones para desentrañar la red de corrupción y narcotráfico que involucra a miembros de la fuerza policial. La justicia federal está enfocada en determinar el alcance de esta convivencia y desarticular la organización delictiva.

Este caso pone en evidencia la infiltración del narcotráfico en las fuerzas de seguridad y marca la necesidad de medidas más estrictas y efectivas para combatir la corrupción y el crimen organizado en la región. La lucha contra el narcotráfico en Salta y en toda Argentina enfrenta desafíos significativos, y este operativo destaca la importancia de la colaboración entre diferentes entidades gubernamentales para abordar el problema.

La detención de estos oficiales y la incautación de la cocaína es un paso importante, pero queda mucho por hacer para asegurar que la justicia prevalezca y se restauren la confianza y la seguridad en las instituciones encargadas de proteger a la ciudadanía.