Habló el dueño de la peluquería y reveló lo que nadie sabía: "Estaba..."

Después de una intensa búsqueda de dos meses, las autoridades policiales lograron detener este miércoles a Abel Guzmán, el colorista acusado de disparar mortalmente a su compañero Germán Medina en una peluquería de Recoleta. El arresto se produjo mientras Guzmán realizaba tareas de jardinería en una casa de Moreno.

Facundo Verdini, propietario del local donde ocurrió el trágico suceso, recibió la noticia con un sentimiento agridulce. "Estaba a 10 minutos de donde estoy trabajando ahora", destacó. A pesar de la sorpresa, Verdini expresó su alegría por la captura del fugitivo.

La recompensa de 5 millones de pesos ofrecida por información sobre Guzmán fue fundamental para el desenlace de la búsqueda, que llevaba diez semanas de intensa investigación. "Pensaba que el tipo estaba en la otra punta del mundo, en otro país", comentó Verdini. "Y pueden estar escondidos a la vuelta de tu casa", reflexionó sorprendido por la cercanía del arresto con su lugar de trabajo.

El arresto de Guzmán, que había sido objeto de especulaciones sobre su posible fuga al extranjero, finalmente trajo alivio a quienes buscaban justicia por Germán Medina. "La verdad es que ya había pasado mucho tiempo, por suerte lo capturaron y se hizo justicia por Germán", concluyó Verdini.