Juicio de Diego Maradona: detuvieron al custodio

En una inesperada vuelta de los hechos durante el juicio por la muerte de Diego Maradona, el custodio de la estrella futbolística, Julio César Coria, fue detenido por falso testimonio. El incidente ocurrió el 22 de marzo, cuando Coria se presentó como testigo en la quinta jornada del juicio ante el Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de San Isidro. Después de sus declaraciones, tanto el fiscal general adjunto de San Isidro, Patricio Ferrari, como el abogado Fernando Burlando, pidió su detención debido a varias contradicciones en su testimonio, que sembraron dudas sobre la veracidad de su relato.

Coria intentó realizar maniobras de reanimación a Maradona la fatídica mañana del 25 de noviembre de 2020, cuando el ídolo del fútbol falleció en la casa del barrio privado San Andrés, en Benavídez. Durante su testimonio, relató los últimos días de Maradona, incluyendo detalles sobre sus visitas y los momentos previos al deceso, pero se produjo una fuerte contradicción cuando mencionó que la psiquiatra Agustina Cosachov y la enfermera Dahiana Gisela Madrid realizaron maniobras de resucitación cardiopulmonar (RCP), algo que no había mencionado en declaraciones anteriores durante la instrucción del caso. Este cambio en su relato fue clave para que la fiscalía decidiera interrumpir su declaración.

Además, Coria negó haber presenciado una conversación entre el neurocirujano Leopoldo Luque y Jana Maradona, algo que los fiscales demostraron como falso a partir de una serie de chats entre Luque y otros testigos. Coria había afirmado varias veces que no tuvo contacto con Luque ni con Jana, pero las pruebas presentadas por la fiscalía lo desmentían. Ante esto, el abogado Fernando Burlando solicitó que Coria fuera detenido por el delito de falso testimonio, un delito contemplado en el Código Penal argentino.

Tras un breve cuarto intermedio, los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach resolvieron por unanimidad aceptar la solicitud del fiscal y ordenar la detención del imputado. Los jueces argumentaron que el testimonio del custodio había sido inconsistente y que sus declaraciones eran cruciales para el esclarecimiento de los hechos que rodearon la muerte de Maradona.