Detuvieron a una secta rusa acusada de trata de personas: su líder intentó quitarse la vida

Un operativo conjunto de la Policía Federal Argentina (PFA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) llevó a la detención de 14 personas acusadas de formar parte de una secta liderada por Konstantin Rudnev, un exsoldado ruso, en Bariloche y Aeroparque. Los detenidos tenían como destino final la ciudad de San Pablo, Brasil, y están siendo investigados por su posible participación en una red de trata de personas.

La investigación comenzó luego de que una mujer rusa llegara al Hospital Zonal de Bariloche para dar a luz. La joven, temerosa por la seguridad de su bebé, alertó a los médicos sobre la actitud controladora de las mujeres que la acompañaban, quienes no la dejaban hablar. Esto despertó las sospechas de los profesionales, quienes notificaron a las autoridades. Aunque la joven fue rescatada y las acompañantes detenidas, posteriormente fueron puestas en libertad.

A raíz de este episodio, la Justicia comenzó a seguir de cerca a las personas involucradas en una causa vinculada con la trata de personas. El fiscal general Fernando Arrigo y el juez federal Gustavo Zapata ordenaron las detenciones el pasado sábado.

En el Aeropuerto Internacional Teniente Luis Candelaria de Bariloche, un hombre y ocho mujeres fueron arrestados, mientras que en Aeroparque se detuvieron a seis mujeres más. La mayoría de los detenidos tenían como destino la ciudad de San Pablo.

Konstantin Rudnev, líder de la secta, fue uno de los aprehendidos. El exsoldado ruso, condenado en 2011 por abuso sexual en su país, se hacía llamar "Gran Shaman Shri Dzhnan Avatar Muni" y afirmaba ser un "dios de la estrella Sirio". Este hombre habría enseñado yoga y meditación a cambio de exorbitantes sumas de dinero, con cursos de hasta 5000 dólares por persona.

Tras las detenciones, los fiscales sostienen que la secta podría estar involucrada en una red de explotación sexual. Las primeras pericias revelaron que algunas de las mujeres detenidas estaban casi desnutridas, y una de ellas declaró que sus comunicaciones eran controladas.