Gran conmoción en Salta: saldrá en libertad uno de los peores asesinos

Durante la mañana del lunes 4 de mayo de 1998 en la calle Olavarría, dos personas secuestraron a los niños y los llevaron camino hacia el sur de la ciudad. Se supo que una vez en el vehículo los obligaron a tragar y respirar cocaína, los quemaron con cigarrillos y luego abusaron sexualmente de la niña delante de su pequeño hermano.

Los cuerpos fueron encontrados, poco antes de las tres de la tarde del 10 de mayo de 1998. Estaban vestidos, aunque a Melany le faltaban las zapatillas. También se habían encontrado sus mochilas y una polera salpicada con sangre. Éste es el triste caso de los hermanos Leguina: Octavio y Melany, cuando ellos tenían 6 y 9 años respectivamente.

Los asesinos recién fueron presos casi un año después cuando una testigo de identidad reservada mencionó el nombre de Marcelo Torrico. Junto a él apresaron a su cómplice, Ariel "Popeye" Brandán.

El 10 de diciembre de 1999 llegó la sentencia. El tribunal presidido por Alberto Fleming, Susana Sálico de Martínez, Antonio Morosini y la secretaría de Ana Gloria Moya condenó a reclusión perpetua y reclusión por tiempo indeterminado a los dos imputados. Se los encontró culpables de rapto, drogadicción de los dos hermanitos, la violación de la nena y el doble homicidio agravado por alevosía. Para la fiscal Herrera de Gudiño, el motivo del rapto fue la satisfacción sexual de los acusados, y el asesinato fue un medio favorable para ocultar el crimen".

Uno de los asesinos saldrá en libertad

Ya pasaron 25 años del brutal asesinato a los hermanitos Leguina, y uno de sus asesinos está próximo a quedar en libertad. 

Ariel Esteban "Popeye" Brandan, fue el encargado de secuestrar a Melani y Octavio. Los torturó, abusó y asesino a la par de Torrico. 

Nacido el 20 de febrero de 1976, Brandán tenía 22 años cuando cometió el delito que lo llevaría a pasar más de la mitad de su vida en el penal de Villa Las Rosas, y fue descrito por el psiquiatra del Poder Judicial provincial, David Flores, como "una persona sumisa". A diferencia de Torrico, casi no volvió a ser nombrado en los medios de comunicación por una simple razón: en la Unidad Carcelaría Nº 1 pasa su tiempo desapercibido desde hace 24 años y medio, según textuales de DiarioElTribuno.

 A su vez, se supo que una vez detenidos los dos criminales, no volvieron a tener más comunicación ya que Marcelo Torrico se aloja en la celda de máxima seguridad en el pabellón 'R' y Brandán fue alojado en la celda 37 del pabellón 'C'. 

Otros datos que se filtraron de Brandán, es que poseé una conducta de "6 puntos", ya que hace bastante no recibe una sanción por parte de los penitenciarios, donde la última vez fue hace 3 años por tener auriculares entre sus pertenencias. "El interno concurre a actividades en el sector de Bienestar y se anda portando bien, hace mucho no es sancionado" finalizó ElTribuno.

El peligroso asesino Brandan está en la recta final de su condena, que va a finalizarla de 'punta a punta', ya que en octubre será la finalización de la misma y podrá salir en libertad. 

Brandan actualmente tiene 47 años y pasó más de la mitad de su vida tras las rejas. De hecho 22 años estuvo en libertad y 25 tras las rejas. ¿Cómo se integrará a la sociedad? ¿Se irá de Salta? ¿Volverá a delinquir? Son muchas de las interrogantes que se plantean de este peligroso asesino.