Banda narco Cala-Alemán: cómo eran los roles de los detenidos

En una operación dirigida por la Procuraduría de Narcocriminalidad, ocho personas fueron imputadas por asociación ilícita, transporte de estupefacientes y lavado de activos en Salta, y que pertenecían al Clan narco Cala-Alemán. La banda, que operaba en el norte de la provincia, abastecía droga a Santiago del Estero y Córdoba, realizando envíos de 100 a 200 kilos de cocaína desde 2011.

La investigación, a cargo de Diego Iglesias y el fiscal general Eduardo Villalba, reveló que Melisa Alemán y Emmanuel Gabriel Cala lideraban la organización. Además de ellos, fueron imputados sus hijos y otros miembros de la banda: Facundo, Alex, Dalci, Kevín, Marcelo Nicolás Juárez, Iris Ibáñez, y Danner Felipe Dávalos Bolívar.

En cuanto a los roles dentro de la organización, Cala y Alemán dirigían las actividades, adquiriendo droga de proveedores en Bolivia. Ibáñez era responsable de trasladar dinero a diversas ubicaciones, mientras que Dalci Alemán administraba los bienes adquiridos ilícitamente. Danner Dávalos Bolívar tenía un papel crucial en el lavado de activos, gestionando cuentas web y borrando información de teléfonos utilizados por la organización, lo llamaban "el hacker".

La fiscalía imputó 38 hechos de lavado de activos, incluyendo la compra de propiedades, vehículos y otros bienes a lo largo de 15 años. 

Cala y su pareja "distribuían tareas" al resto de los acusados, y que se advirtieron frecuentes viajes a Córdoba y Santiago del Estero. "Ellos disponían los pagos y determinaban quiénes debían viajar, ya sea con estupefacientes o con dinero", sostuvo el director de Procunar NOA a NuevoDiario.

En ese sentido, indicó que Cala ejercía una participación personal en la logística de las operaciones de tráfico, mientras que su pareja era quien intervenía en la adquisición de la droga, pues posee contactos con proveedores en Bolivia. "Siempre estaba atenta a que los integrantes se comuniquen vía WhatsApp y no por línea, a fin de no ser descubiertos", agregó.

Añadió que Cala se ocupaba de adquirir y proveer los teléfonos celulares para la comunicación entre los integrantes de la organización, tarea que la relacionaba directamente con Danner Dávalos Bolívar, quien ejercía un rol clave, pues era el encargado del servicio técnico del área de informática y lo conocían como "el hacker".

"Este miembro del clan, en particular, era responsable de gestionar las cuentas web utilizadas por la organización y se encargaba de borrar información de los celulares que eran usados por los acusados", precisó la auxiliar fiscal, quien destacó que, de las intervenciones telefónicas, surgen pedidos para "limpiar" algunos teléfonos.