Le quitó la vida a su amigo y lo agarraron comiendo un sándwich: confesó todo

Federico Muñoz, de 35 años, fue detenido en Río Gallegos tras confesarle a su exnovia que había asesinado a su amigo Óscar Lancucheo de varias puñaladas en el cuello. 

El brutal ataque ocurrió el 26 de octubre en la casa de Lancucheo, ubicada en la calle Jofré de Loaiza, cerca de la Laguna María La Gorda. Según las investigaciones, Muñoz habría llegado armado con un cuchillo y, tras una discusión, atacó a la víctima, aparentemente motivado por una deuda económica que los tenía enfrentados desde hacía semanas.

El crimen fue reportado a la policía por la exnovia de Muñoz, quien relató que él le confesó el asesinato y le mencionó sus intenciones de quitarse la vida. Tras una breve huida, los efectivos lograron detenerlo mientras comía un sándwich en la costanera de la ciudad. Desde entonces, permanece en custodia policial, y las autoridades han pospuesto su indagatoria para someterlo a una evaluación psicológica.

Muñoz había dejado días antes un mensaje en Facebook que ahora resuena de manera inquietante, "Intentar y no dejar de intentar. La vida es hermosa". 

Sus conocidos y familiares de Lancucheo, un trabajador del Hospital Regional de Río Gallegos, expresaron en redes su dolor y exigieron justicia. Una amiga de la víctima, recordando la bondad de Óscar, publicó en sus redes, "Así te voy a recordar, amigo mío, el que no tenía quilombos con nadie y siempre fue selectivo con los amigos". También señaló que, a pesar de sus problemas, Óscar había sido el único en abrirle las puertas de su casa al acusado, quien, lamentablemente, le pagó de la peor manera.