En una clínica del norte, entregaron el cadáver equivocado

Una familia con domicilio en Alto Comedero denunció que el cadáver una pariente, que había sido internada por COVID-19 y posteriormente falleció, desapareció de la morgue de la clínica de Perico a la que había ingresado.

Las autoridades de la clínica llamaron a la familia el 10 de agosto para avisarles del deceso. Cuando se presentaron en el nosocomio al día siguiente, para la inhumación del cuerpo, se dieron con la sorpresa de que el cadáver no estaba.

Luego de varias averiguaciones, les avisaron que hubo una confusión y que el cuerpo de la mujer había sido entregado a una familia de Puesto Viejo y que ya había sido inhumado, por lo que inmediatamente procedieron a realizar la denuncia correspondiente, según informó Notinor.

Según se supo, se habría tratado de dos personas fallecidas en el mismo día, por lo que se está investigando el caso para ver dónde estuvo el error y de quién sería la responsabilidad, si de la clínica o el morguero.

Finalmente, según detalló el Comisario Inspector Jorge Soto, se debió exumar el cadáver de la mujer y entregarlo a los familiares. Tomó intervención la Fiscalía de Turno.