Dónde está el asqueroso que se sacó la foto con Maradona muerto

De un día para el otro Diego Molina pasó a ser el hombre más odiado en Argentina. Es quien se sacó una foto con el pulgar hacia arriba en la cabecera del ataúd donde yacían los restos de Diego Armando Maradona. Además, el hombre tiene su mano apoyada sobre la frente del astro.

La imagen, que fue tomada mientras se preparaba el cuerpo para su velatorio, generó el repudio automático cuando fue difundida en las redes sociales.

De acuerdo a la información que le suministraron al letrado para identificar a Diego Molina, este sería el "jefe de sepelios de Pinier". Sin embargo, según la información suministrada por la casa fúnebre, este hombre no sería empleado de esa empresa.

La versión de la funeraria

Ellos (Molina y los otros dos hombres de las fotos) no son empleados nuestros. Nosotros somos tres hermanos. A ellos los contratamos para llevar la capilla, son una empresa de ambulancias, o unidades de traslado. Nosotros tercerizamos a veces ese servicio", dijo, a LA NACION, Matías Picón, uno de los empresarios que dirige Sepelios Pinier.

El hombre explicó que, a veces, para trasladar el ataúd y demás objetos que forman parte de un funeral, no alcanza con los vehículos propios de la casa funeraria, y entonces se debe contratar otro servicio. En este caso, la compañía donde trabaja Molina fue llamada para que llevaran a la Casa Rosada la capilla de bronce para poner el féretro de Maradona.

Y agregó que Molina y los otros dos hombres hicieron lo que no debían en muy poco tiempo. "Terminamos de preparar a Diego, salimos para coordinar con la policía el camino que tomarían los coches y en ese interín de un minuto se sacaron las fotos".

El hombre aseguró nuevamente que Molina no era empleado suyo y tampoco las otras dos personas. Con respecto a estos últimos, Picón dijo que el más adulto de los dos se llamaba Claudio Fernández.

Además, sumó que desde que se difundieron las fotos, que, según él, comenzaron a pasarse en grupos de WhatsApp, está tratando de comunicarse con Molina, pero que no le atiende el teléfono.